ΓΙΑ ΟΣΟΥΣ ΑΓΑΠΟΥΝ ΦΑΝΑΤΙΚΑ ΤΟ ΤΑΝΓΚΟ ΚΑΙ ΤΟ ΠΟΔΟΣΦΑΙΡΟ
Para todos aquellos fánaticos del tango y del fútbol acá les dejo un compilado de tangos que hacen referencia a estas dos pasiones populares. Que lo disfruten !!!
Σάββατο 30 Ιουνίου 2012
Παρασκευή 29 Ιουνίου 2012
Πέμπτη 28 Ιουνίου 2012
ΑΥΤΟ ΤΟ ΤΑΝΓΚΟ ΠΟΥ ΛΕΓΕΤΑΙ ΠΟΔΟΣΦΑΙΡΟ
LEONARDO BUSQUET*
ESE TANGO LLAMANDO FÚTBOL
Qué sería de un club sin el hincha,
una bolsa vacía. El hincha es el alma de los
colores,
es el que no se ve, el que se da todo sin esperar nada.
Ese es el
hincha.
Enrique Santos Discépolo en la película “El hincha”
Buenos Aires es una complicada ciudad rioplatense desbordada de triunfos y
derrotas. Amalgama en su seno dos pasiones que entremezclan ilusiones,
recuerdos y deseos. Las piernas, la cintura y el corazón protagonizan ambos
ardores que llegaron de afuera con formas y estilos que aquí nos encargamos de
reinventar. Las dos cobraron tamaña fuerza popular que desplazaron a otras
fogosidades. Las pasionales formas que cito tienen nombre propio y su sola
mención genera apologías y rechazos: el tango y el fútbol. Dos perplejidades
que regaron estas tierras en una aproximada contemporaneidad atrapada por el
final del siglo XIX y los primeros vagidos del XX.
El football nació en Inglaterra. Dicen que se inspiraron en las
bravas competencias de los caballeros medievales. Football, balompié o
simplemente fútbol.
Con el tango la cosa no es tan simple. Su esencia está abroquelada en la
polémica. Algo de España, quizá de Africa o el condimento de la habanera. En
fin. Lo cierto es que llegó y se impregnó de nosotros, que tampoco somos tan
originales. Para Ernesto Sábato, “Los millones de inmigrantes que se
precipitaron sobre este país en menos de cien años, no sólo engendraron esos
dos atributos del nuevo argentino que son el resentimiento y la tristeza, sino
que prepararon el advenimiento del fenómeno más original del Plata, el tango. Este
baile ha sido sucesivamente reprobado, ensalzado, satirizado y analizado. Pero Enrique
Santos Discépolo, su creador máximo, da lo que yo creo la definición más
entrañable y exacta: Es un pensamiento triste que se baila. (…) El tango
encarnaba los rasgos esenciales del país que empezábamos a tener: el desajuste,
la nostalgia, la tristeza, la frustración, la dramaticidad, el descontento, el
rencor y la problematicidad”. Con esta definición comenzamos a encontrar
denominadores comunes entre el tango y el fútbol. Ambos vinieron de extramuros.
Los dos se nutrieron en el arrabal. El tango en el suburbio y el fútbol en el
potrero. El barrio de Palermo fue un punto de encuentro. Ambos conocieron el desprecio
inicial y son hijos de la miseria, como diría Dante Panzeri. El vistoso juego
de las piernas, la gambeta y la pelota conjuga pasión, amor, odio e
irracionalidad. El seductor baile de las piernas, las quebradas y la cintura,
también. Ambos seducen desde sus respectivas génesis.
El fútbol tiene cuatro elementos vitales: el hincha, la pelota, el jugador
y el gol. Es un acto de amor y si como dijo Galeano, el gol es el orgasmo, la
camiseta es la sábana cómplice. La pelota es el elemento que “no se mancha”
pero que muchas veces fue ensombrecida. Por su parte, el hincha es sinónimo de
tablón, de domingo y de camiseta transpirada antes. Este curioso deporte que
supo despertar el rechazo dialéctico de Borges, vino de la mano de la flema
inglesa, con una técnica depurada, ordenada, casi exacta. Era el football y
nosotros, viveza criolla mediante, lo convertimos en fóbal y el off side
en orsay. Así trascendió al campo del pueblo. Los ingleses llegaron al Plata
con su “caballerosidad deportiva” y el argentino provocador le metió el fuego
de la picardía.
El fútbol y el tango se hicieron desde abajo pero no tardó mucho en
subyugar a las clases altas que quebraron ciertos prejuicios y avanzaron sobre
ambas pasiones.
Albert Camus, un escritor de origen argelino que desarrolló un humanismo
fundado en la conciencia del absurdo, fue Premio Nobel de Literatura en 1957.
Militante político y miembro de la resistencia francesa contra la invasión
nazi, autor de La Peste y El Extranjero, reivindicó el fútbol como una forma de
vida: “…Después de muchos años en que el mundo me ha permitido variadas
experiencias, lo que más sé, a la larga, acerca de la moral y de las
obligaciones de los hombres, se lo debo al fútbol”. Un detalle: Camus, en
su juventud, fue arquero.
El recordado periodista Dante Panzeri escribió un libro analítico sobre el
fútbol cuyo título guarda una de las más precisas definiciones sobre el
deporte: “Fútbol, dinámica de lo impensado”. En el tango, el contacto sensual
de los cuerpos, también nace de lo impensado. Muchos escritores quebraron esa
absurda distancia entre lo popular y lo intelectual elitista y avanzaron sobre
la pasión futbolera. Eduardo Galeano, el negro Fontanarrosa y el gordo Soriano
son algunos de los casos emblemáticos. Milan Kundera aventuró: “Creo que el
fútbol es un pensamiento que se juega. Y más con la cabeza que con los pies”.
Pero, cuando los ánimos se exacerban, los espíritus ya nada pueden esperar de
la razón. El fútbol pasión despierta, como en otros aspectos de la vida,
antinomias, revanchismos y fanatismos. También el tango y si no, hay que
recordar los debates atenienses acerca de Piazzolla. Dicen los que saben que en
el fútbol hay una mezcla de deseo, fantasía, sueño y poder… como en la vida,
que nutre la filosofía tanguera de estaño. Ambos son fenómenos colectivos muy
próximos a las perplejidades y desventuras de la vida. Son pasiones populares
que nacen en algún lugar del cuerpo y donde no tienen cabida los “pechofríos”.
El tango fue prostibulario porque hubo inmigración de hombres solos, agredidos
por la lejanía de sus memorias originales, cargados de melancolías y
acicateados por la tristeza. Hubo en sus orígenes un tango de ritmo rápido,
presuntamente vivaz que enmarcaba las alegrías en el patio del conventillo,
donde el piberío apuraba gambetas con la pelota de trapo. Era el tango
pecaminoso y orillero cuya formación musical original se reducía a la flauta,
la guitarra y el violín. Poco después arribó el bandoneón para ejercer el pleno
derecho de la melancolía. Entonces el tango se desaceleró y adoptó una cadencia
de tristeza existencial por amores quebrados. La idiosincrasia del inmigrante
tuvo mucho que ver pero también incidió la lejana cadencia del gaucho reprimido
que los años transformaron en guapo, compadrito o cafishio, según el caso, las
necesidades y el cambio histórico-cultural de la metrópoli. En ese proceso se
infiltró el fútbol que, como el tango, evolucionó y que esa compleja mixtura
que es el argentino, lo nutrió con la habilidad del cuerpo y del alma y lo
parió a su manera. Pero hay una diferencia que lastima. El fútbol sufre un
costado más sinuoso y hasta siniestro: el negocio desmesurado al amparo de la
organización de mafias que violenta el espíritu leal del hincha.
Desmesurado negocio
Mientras la pasión del tablón queda restringida al común de la hinchada que
transpira la camiseta con honestidad, el impresionante negocio internacional
del fútbol se desnuda como un nuevo mercado de personas cuya plaza pública
mayor es ese Mundial que se celebra-comercia cada cuatro años.
Asociaciones locales, instituciones regionales con sus respectivos
dirigentes, intermediarios y los propios astros del juego, son parte de una
negociación de compra-venta con precios siderales y oscuras transacciones en un
mundo desbordado de inequidades. La FIFA es uno de los “estados” más poderosos
de la tierra. Maneja un presupuesto varias veces superior a muchos países
pobres hipócritamente denominados “emergentes”. Maneja también el poder de las
relaciones políticas. Ser presidente del club Barcelona (por citar solo un caso
trascendente) es convertirse en una suerte de mandatario que es recibido en
cualquier parte del mundo con los rictus del protocolo oficial. Esto es poder
en estado puro. En un mundo donde las injusticias sociales son cada vez más
hirientes, donde las asimetrías económicas concentran a pocos ricos, cada vez
más ricos, y a muchos pobres, cada vez más pobres, las cifras por la venta de
jugadores, más los contratos publicitarios paralelos, son poco menos que
obscenas. Para muchos, el fútbol-negocio comenzó en los años 30 con la
irrupción del profesionalismo. Los más guarangos afirman que en esa época
comenzó la prostitución del fútbol. En 2009 la FIFA tuvo ganancias por más de
147 millones de euros y concentró un capital que asciende a casi 800 millones
de euros. Esas son las cifras oficiales. Y es solo una parte del escándalo. Hay
que volver a Dante Panzeri: “El fútbol fue un juego y un negocio. Hoy es el
negocio de un juego de palabras. El fútbol del talento es hijo de la miseria.
El fútbol miserable es hijo de la riqueza”. Menos mal que tenemos el tango
a mano para enjugar ciertos dolores.•
* Leonardo Busquet, tanguero irrecuperable y sufrido hincha de
River.
Πηγή / Fuente:
εδώ.
Τετάρτη 27 Ιουνίου 2012
RUBÉN GRASSI
TANGO POR
RUBÉN GRASSI*
Το ακούμε εδώ.
Las defensas se
abrieron a tu paso,
los arqueros temblaron frente a vos,
esos goles, esos pases, esas gambetas
guardan el eco del eco de ovación.
Rubén Grassi, hoy vivís en el recuerdo...
De la hinchada que añora con dolor
apiladas innarrables de otros tiempo
los arqueros temblaron frente a vos,
esos goles, esos pases, esas gambetas
guardan el eco del eco de ovación.
Rubén Grassi, hoy vivís en el recuerdo...
De la hinchada que añora con dolor
apiladas innarrables de otros tiempo
que la leyenda ha
llegado a la canción...
No habrá ninguno igual. No habrá ninguno.
Ninguno con tu clase y tu pasión.
Tu clase, contrarios que dejó en el suelo.
Pasión, por Ferro que hoy ya es amor.
No habrá ninguno igual,
todos murieron
cuando al fútbol le dijiste adiós…
No habrá ninguno igual. No habrá ninguno.
Ninguno con tu clase y tu pasión.
Tu clase, contrarios que dejó en el suelo.
Pasión, por Ferro que hoy ya es amor.
No habrá ninguno igual,
todos murieron
cuando al fútbol le dijiste adiós…
No habrá ninguno igual. No habrá ninguno.
Ninguno con tu clase y tu pasión.
Tu clase, contrarios que dejó en el suelo.
Pasión, por Ferro que hoy ya es amor.
No habrá ninguno igual,
todos murieron
cuando al fútbol le dijiste adiós…
No habrá ninguno igual. No habrá ninguno.
Ninguno con tu clase y tu pasión.
Tu clase, contrarios que dejó en el suelo.
Pasión, por Ferro que hoy ya es amor.
No habrá ninguno igual,
todos murieron
cuando al fútbol le dijiste adiós…
Στίχοι: Juan Francisco Sánchez Torres (El "Chamo").
Μουσική: Raúl González.
* Έχει γραφτεί πάνω στο τάνγκο "Ninguna", σε στίχους του Homero Manzi
και μουσική του Raúl Fernández Siro.
Ferro
Carril Fútbol Club
Τρίτη 26 Ιουνίου 2012
ΕΝΑ ΠΟΙΗΜΑ ΓΙΑ ΤΟ VIEJO GASÓMETRO ΤΗΣ ΣΑΝ ΛΟΡΕΝΤΣΟ
ΑΠΑΓΓΕΛΛΕΙ Ο ALEJANDRO APO
FADY MARSHALL
VIEJO GASÓMETRO
dejando otras cosas vacío el lugar.
Maderas gastadas, amigas del viento,
que ya Buenos Aires no quiere guardar.
Sublime poesía, sensual, motivada
por música en barras que ya no estarán.
Se irán cuando todo se lleve la grúa,
con bombos, historia, su guerra y su paz.
Se quedara viuda la vieja Avenida,
pareja perpetua, mujer sin altar.
No existirá nadie que pueda explicarle
por qué San Lorenzo se fue del lugar.
Ha de ser recuerdo la imagen genial,
reliquia del tiempo, regalo de dios.
Estadio testigo, no solo de fútbol,
también de la historia, de aquel y de vos.
Se irán por las calles maderas gastadas,
llevando con ellas la luz de este sol.
Se quedara triste la vieja avenida,
Almagro, Boedo, que solos los dos.
*********************** ***********************
VIEJO GASÓMETRO
ALEJANDRO APO
CLUB ATLÉTICO SAN LORENZO DE ALMAGRO
Ετικέτες
ΠΟΙΗΣΗ,
APO (ALEJANDRO),
CLUB ATLÉTICO SAN LORENZO DE ALMAGRO,
MARSHALL (FADY),
SAN LORENZO,
VIEJO GASÓMETRO
Δευτέρα 25 Ιουνίου 2012
ΕΝΑ ΤΣΑΜΑΝΕ ΓΙΑ ΤΟΝ ΜΟΥΣΙΜΕΣΣΙ
MARIANO JESÚS CAMACHO
JULIO ELÍAS MUSIMESSI EL GUARDAVALLA CANTOR
Nacido un 9 de julio de 1924 en el Chaco Julio Elías
Musimessi llegó a la portería de casualidad, cuentan que el bueno de Julio
era un apasionado y bastante hábil con la pelota de basket, algo que conocían
de primera mano sus amigos y que en una tarde de picada de fútbol entre chicos
del barrio se lesionó el portero habitual por lo que estos amigos conocedores
de su buen hacer con las manos le propusieron suplir al joven lesionado. Julio
lo hizo tan bien que a partir de entonces no paró de atajar balones hasta que
en 1959 el portero de Corrientes saltó al césped por última vez para defender
el arco de Boca.
De estilo desgarbado, dotado de una gran agilidad, poseía unos movimientos felinos que le permitían llegar a balones imposibles ya fueran por bajo o por alto, pese a su modesta estatura. Unas cualidades que le valieron para ganarse el sobrenombre de “Gato”, tras una asombrosa actuación con la albiceleste ante España tras la que el Real Madrid intentó su contratación. Pero sería en Newells y en Boca Juniors donde disfrutarían con las felinas estiradas de Musimessi. Especialmente con la camiseta de Boca, con la que jugó 338 partidos en primera. Siendo el arquero titular desde el 53 al 59, una época en la que comenzó a despuntar por otra de sus grandes cualidades: su voz.
Y es que Julio fue habitual del programa de radio LR4 Radio Splendid de Buenos Aires la Gran payada del fútbol, conducido por Juan Monti, uno de los más destacados en la radio de ese entonces. Un espacio radiofónico al que solían acudir diversos futbolistas que cantaban bastante bien como Ubaldo Faina de San Lorenzo, Gilberto Pascasio Sola de River pero especialmente Julio Elías Musimessi.
Usando como argumento lo acontecido en los partidos que recién habían terminado, los futbolistas dejaban escapar su voz, su talento y su imaginación. A Julio se le presentaba de la siguiente manera: “Julio Elías Musimessi, el guardavalla cantor”.
Allí Musimessi como buen correntino que era interpretaba la
música litoraleña. Concretamente en 1954, y con motivo de la conquista del
campeonato, grabó un disco interpretando un chamamé, una palabra originaria de
la frase en idioma guaraní “ñe’ẽ mbo’e jeroky” que quiere decir “cantos
danzas”. Una palabra que define un género bailable de música folclórica
argentina, correspondiente a la música litoraleña, en especial de la provincia
de Corrientes y de la provincia de Misiones; región denominada Litoral
argentino.
La canción se llama… DALE BOCA… y ahí van algunas de sus estrofas…
YO SOY NACIDO EN CORRIENTES
LA TIERRA DEL CHAMAMÉ
QUE LO BAILAN CON CARiÑO
Y LO CANTAN CON PLACER…
LA TIERRA DEL CHAMAMÉ
QUE LO BAILAN CON CARiÑO
Y LO CANTAN CON PLACER…
Y AHORA EN BUENOS AIRES
ME DIVIERTO CON AMOR
CUANDO VOY POR LOS DOMINGOS
A VER JUGAR A UN CAMPEON…
ME DIVIERTO CON AMOR
CUANDO VOY POR LOS DOMINGOS
A VER JUGAR A UN CAMPEON…
EL CUADRO QUE YO LES NOMBRO
TIENE CAMISETA AZUL
CON UNA FRANJA DE ORO
Y ESTRELLAS DE NORTE A SUR
TIENE CAMISETA AZUL
CON UNA FRANJA DE ORO
Y ESTRELLAS DE NORTE A SUR
Y EN EL ARCO DE MI CUADRO
HAY UN ARQUERO CAMPEON
QUE CANTA POR QUE LE GUSTAN
LOS CHAMAMES DE SU FLOR
HAY UN ARQUERO CAMPEON
QUE CANTA POR QUE LE GUSTAN
LOS CHAMAMES DE SU FLOR
DALE BOCA… VIVA BOCA
EL CUADRITO DE MI AMOR
DALE BOCA, VIVA BOCA
EL CUADRITO DE MI AMOR!!…
EL CUADRITO DE MI AMOR
DALE BOCA, VIVA BOCA
EL CUADRITO DE MI AMOR!!…
Πηγή / Fuente
εδώ.
Ετικέτες
ΑΡΘΡΟ,
ΤΣΑΜΑΝΕ,
BOCA JUNIORS,
CAMACHO (MARIANO JESÚS),
CLUB ATLÉTICO BOCA JUNIORS,
DALE BOCA,
EL GUARDAVALLA CANTOR,
MUSIMESSI (JULIO ELÍAS)
Κυριακή 24 Ιουνίου 2012
Η ΔΟΞΑ
GOTAN PROGECT "LA GLORIA"
La Gloria,
the first single taken from this forthcoming Gotan Project album "Tango
3.0", features an inspired vocal contribution from the celebrated
Argentine football commentator Victor Hugo Morales (who name-checks all the musicians featuring on the track before shouting GOOOOOOTAN instead of his trademark GOOOOOOOAL!!
Σάββατο 23 Ιουνίου 2012
ΤΟ ΤΑΝΓΚΟ ΜΕ ΠΟΔΟΣΦΑΙΡΙΚΗ ΣΤΟΛΗ
GONIO FERRARI
EL TANGO CON CAMISETA Y BOTINES
Los rioplatenses,
entre sus amores más enraizados, tienen a la Vieja, el tango y el fútbol. No
extraña entonces que cada club posea su “himno” en 2 por 4.No es un
descubrimiento de los historiadores ni de los sociólogos sostener que entre los
amores eternos, enraizados e indelebles de los rioplatenses, en el orden que
cada uno quiera asignarle, están la Vieja, el fútbol y el tango. Son variadas e
innumerables las creaciones con ritmo de tango, marcha y otros, ejecutados por
orquestas típicas y renombrados vocalistas, como por ejemplo Racing Club,
Independiente Club o el Himno a River Plate que grabara en 1931 Francisco
Canaro con Ernesto Famá poniéndole su voz. También está Boca Juniors, de 1954
por Miguel Caló con Roberto Arrieta. Y cruzando el Rio de la Plata se
detectaron emotivos reconocimientos como el tango Y siempre Peñarol, donde se
mencionan hazañas y personajes de esa divisa en la década del ’50, que cantaba
Luis Alberto Fleitas acompañado por la orquesta de “Pirincho” Canaro.
Made in Avellaneda
Hurgando en los antecedentes, aparece como unas
de las primeras grabaciones que aluden al Racing Club, las que hicieron Oscar
Cobián y Roberto Firpo, allá por 1913 y dos años más tarde, una de Francisco
Canaro. Pasó bastante tiempo hasta que Carlos Di Sarli en 1940, Angel
D’Agostino en 1946 y Rodolfo Biagi en 1950 llevaran sus creaciones a la
insobornable memoria del disco. Sin embargo ahora se sabe que una versión
anterior de Alfredo Gobbi (h) en 1949 fue considerada de alta calidad con
relación a las otras. No hay que dejar de lado, en honor a la historia, una
inédita grabación en vivo realizada en Montevideo cuando corría 1941 por parte
de la orquesta del celebrado bandoneonista Aníbal “Pichuco” Troilo.
Y Agustín Bardi, otro de los grandes
creadores de música, tituló una de sus obras con el nombre de Independiente
Club, dedicada al Rey de Copas o Los diablos rojos. En 1953 fue Héctor Varela,
un reconocido fanático de los Diablos rojos de Avellaneda el autor del tango
homónimo, registrado para el sello Pampa.
El ciclón de Boedo
Al
amparo de la sombra que generosamente ofrecía la parroquia de San Lorenzo de
Almagro, allá por 1907 nació lo que primero fue Los forzosos de Almagro, con
camisetas color borravino, puños y cuello blancos, atuendo que duró un par de
años hasta que se impuso el actual azulgrana. Y en homenaje al primer
campeonato conquistado por el club de Boedo, el bandoneonista Luis Servidio
dedicó un tango para festejar esa hazaña deportiva. Cuatro años después y en
coincidencia con otra importante conquista azulgrana, José Rebolini y Carlos
Pesce compusieron San Lorenzo. Por aquellos tiempos, el ala derecha del equipo
superior, campeón en 1927, estaba integrada por Carricaberry y Maglio, este
último, hijo del célebre “Pacho”. No fueron las únicas expresiones musicales
alusivas, porque también hicieron lo suyo Francisco Caso y Francisco Lio, sin
dejar de lado el tango El ciclón, de Anselmo Aieta y Francisco Laino, aparte de
Azulgrana, hermosa creación instrumental de Osvaldo Requena.
Boca-River, un clásico
El equipo de la ribera ha sido uno de los más
homenajeados con tangos alusivos, como por ejemplo el registro de Juan
D’Arienzo en 1946 titulado Azul y Oro, de Eduardo Aguirre o José Basso quien
registró Once y uno, llevado al disco en 1952. Allí aparece por primera vez una
mención al “jugador número 12”
como se denomina hasta la actualidad a la barra de simpatizantes boquenses.
Miguel Caló aportó el tango Boca Juniors y hubo muchas otras expresiones de
homenaje y reconocimiento a la trayectoria deportiva. Viene al caso recordar la
trascendencia que alcanzó Julio Elias Musimessi, jugador boquense nacido
en Chaco, más conocido como “El guardavalla cantor”, quien dejó para la
posteridad el chamamé Viva Boca, con autoría de Américo Cipriano y Eduardo
Pauloni, registrado para el sello TK.
En cuanto al Club Atlético River Plate, del
barrio de Núñez, de acuerdo con las estadísticas vencedor en 31 campeonatos de
la primera división dentro de la era profesional, recibió como uno de los
tantos y sentidos homenajes, una versión del maestro Francisco Canaro, el Himno
Oficial de River Plate y otra de Leopoldo Diaz Vélez con el título de “Tarzán”
en inequívoca y merecida alusión al sempiterno Amadeo Carrizo, histórico y
recordado guardavalla del equipo superior de la banda roja, llevado a los
registros por Armando Pontier y Alberto Podestá.
A platenses y jugadores
La
gente vinculada con el tango no se limitó a reconocer trayectorias ni
conquistas deportivas solo de los equipos más empinados, considerados
“grandes”. Gimnasia y Esgrima de La Plata, en 1933, fue homenajeado por
el bandoneonista Horacio Pezzi, quien junto con Carlos Espíndola le dedican su
tango El expreso de La Plata. Y casi dos décadas después, en 1950, Ernesto
Rossi y Francisco Rotundo compusieron Estudiantes de La Plata, un tango
instrumental con el que establecían un necesario equilibrio en la balanza por
la vieja puja futbolera que ya se había instalado en la ciudad de las
diagonales.
Allá por 1928 se dieron ejemplos cercanos a la
idolatría hacia dos destacados futbolistas. Osvaldo Fresedo inscribe Tarasca
solo, cantado por Antonio Buglione en homenaje a Domingo Tarascone, un notable
delantero boquense y Ochoita, en reconocimiento a Pedro Ochoa, un gran
gambeteador del Racing Club de entonces. Y en 1923 Miguel Padula compuso El
mortero del globito en alusión a Emilio Masantonio, destacado jugador de
Huracán y Lemita, donde resalta la trayectoria de Jaime Lema, arquero que pese
a su baja estatura, fue figura descollante en el arco de San Lorenzo de
Almagro, campeón en 1933.
Versiones memorables
Aparte de todas las creaciones que surgieron
para destacar a las instituciones vinculadas con el fútbol, cabe recordar
versiones memorables de temas afines que dejaron para la posteridad los grandes
del tango. Largue esa Mujica, Patadura y Mi primer gol, por Carlos Gardel; la
número 5, por Alfredo Gobbi con Jorge Maciel y relatos de Fioravanti; el
inolvidable El sueño del pibe, por Osvaldo Pugliese con Roberto Chanel o
Ricardo Tanturi con Enrique Campos; Campeones olímpicos, vals de Juan Rodríguez
con acompañamiento de guitarras; Para vos, Chirola, por Héctor Varela; a José
Manuel Moreno, por Francini y Pontier; El taladro, por Alfredo de Angelis y
muchísimos más, que contribuyeron a la historia del tango en base a remembranzas,
emociones y nostalgias.
Πηγή / Fuente: εδώ.
Παρασκευή 22 Ιουνίου 2012
ΕΚΤΩΡ ΒΑΡΕΛΑ & ΕΚΤΩΡ ΓΙΑΣΑΛΔΕ
HÉCTOR VARELA
PARA VOS CHIROLA
Ηomenaje a HÉCTOR CASIMIRO YAZALDE, jugador talentoso y
goleador efectivo de Club Atlético
de Independiente.
Hector Varela Y Su Orquesta Tipica* – Milonguendo En El 40
Label: EMI-Odeon S.A.I.C. –
SLDB 1047
Format: Vinyl,
LP
Country: Argentina
Released: 1971
Genre: Latin
Style: Tango
Φάσεις από τον ποδοσφαιρικό βίο του Γιασάλδε εδώ.
Ετικέτες
ΔΙΣΚΟΣ,
ΜΟΥΣΙΚΗ,
CLUB ATLÉTICO INDEPENDIENTE,
INDEPENDIENTE,
PARA VOS CHIROLA,
VARELA (HÉCTOR),
YAZALDE (HÉCTOR)
Πέμπτη 21 Ιουνίου 2012
OYRAKAN
MARCHA DEL C.A. HURACÁN
Sopla un viento
de triunfos y gloria
corazones que vibran de fe
ya desfilan los grandes campeones
y la hinchada aplaude de pie.
En sus pechos diviso la insignia
confundida con el corazón
es un Globo de fuego que vuela
rumbo al cielo de su inspiración.
Se oye un grito que se expande
por los aires con afán
son millones de gargantas
las que nombran Huracán.
Club glorioso de campeones
con empuje de titán
arrogantes corazones
Huracán, Huracán, Huracán.
Ya termina el desfile armonioso
deportistas de gracia ideal
y al espacio se elevan los hurras
junto al Globo que vuela triunfal.
Ya se marchan los bravos campeones
y la hinchada que alienta a la par
el estadio dormita en silencio
suena un eco, repite Huracán!!!
corazones que vibran de fe
ya desfilan los grandes campeones
y la hinchada aplaude de pie.
En sus pechos diviso la insignia
confundida con el corazón
es un Globo de fuego que vuela
rumbo al cielo de su inspiración.
Se oye un grito que se expande
por los aires con afán
son millones de gargantas
las que nombran Huracán.
Club glorioso de campeones
con empuje de titán
arrogantes corazones
Huracán, Huracán, Huracán.
Ya termina el desfile armonioso
deportistas de gracia ideal
y al espacio se elevan los hurras
junto al Globo que vuela triunfal.
Ya se marchan los bravos campeones
y la hinchada que alienta a la par
el estadio dormita en silencio
suena un eco, repite Huracán!!!
Τετάρτη 20 Ιουνίου 2012
ΤΑΝΓΚΟ ΚΑΙ ΠΟΔΟΣΦΑΙΡΟ
PEDRO UZQUIZA
TANGO Y FÚTBOL:
TODOS LOS CLUBES Y LOS GRANDES
JUGADORES TIENEN CADA UNO SU CANCIÓN CIUDADANA
Crecieron y se desarrollaron juntos. El tablón y el bandoneón se mezclaron entre goles y acordes para dejar sus testimonios. De grandes poetas y músicos, para los futbolistas.
Crecieron y se desarrollaron juntos. El tablón y el bandoneón se mezclaron entre goles y acordes para dejar sus testimonios. De grandes poetas y músicos, para los futbolistas.
Aunque sus orígenes fueron opuestos (el fútbol comenzó a practicarse en los colegios ingleses y el tango nació en la antesala de los prostíbulos), las dos pasiones populares de los argentinos crecieron y se desarrollaron unidas. Se hermanaron en los primeros años del siglo, cuando Buenos Aires cambiaba al formidable impulso que le dieron las corrientes inmigratorias.No fue casual, entonces, que justamente en 1911, con la disolución de Alumni -el equipo que representaba el juego británico de pases largos-, apareciera Racing, incorporando el talento, la picardía de la gambeta y la pelota al piso. Y mucho menos que al mismo tiempo, Vicente Greco trazara el organigrama de las orquestas, que él denominó típicas, incorporando el bandoneón. Y que uno de sus primeros tangos haya sido Racing Club, una obra que hoy perdura por su excepcional calidad.Años después del tango de Greco se conoció Academia Racing Club, de Domingo Precona, director de una orquesta típica que actuaba en Radio Nacional, con letra de Francisco Panigazzi.Agustín Bardi, un violinista autodidacta, cuyos tangos son casi perfectos por su composición, lanzó su Independiente Club, de los que perduran dos formidables registros de la orquesta de Alfredo Gobbi y del dúo Salgán-De Lio. En los 50, Héctor Varela, reconocido hincha de Independiente, compuso Los Diablos Rojos.Boca tuvo en los primeros tiempos dos tangos: uno debido a la inspiración de Roberto Firpo y el otro, registrado en 1916, de José Quevedo, bandoneonista del genial Eduardo Arolas, Boca Juniors Club. En 1931, el periodista Alfredo Bigeschi escribió Campeón cuando Boca consiguió el primer título profesional. En la década del 40, Miguel Caló llevó al disco con la voz de Roberto Arrieta, Boca Juniors, con letra y música de Rodolfo Sciamarella. Héctor Méndez escribió La Boca está de fiesta y finalmente, Roberto Pansera y Roberto Lambertucci compusieron La azul y oro.El bandoneonista José Servidio festejó con su tango San Lorenzo de Almagro el primer título de los azulgranas, en 1923. Con el título siguiente, en 1927, apareció San Lorenzo de José Rebollini y Carlos Pesce. Con el primer logro profesional, en 1933, se conocieron otro San Lorenzo de Francisco Lío y Francisco Caso y El Ciclón de Anselmo Aieta y Laino.En 1911, Arnaldo Yodice, integrante del conjunto de Angel Villodo -autor de El Choclo- y de Rosendo Mendizábal, compuso Estudiantes Foot-Ball Club, dedicado al Estudiantes de Villa Devoto. Juan Ghio escribió la letra y la música de Albirrojo, dedicado al formidable Estudiantes de la Plata de 1931. En 1933, a favor de la gran campaña de Gimnasia La Plata apareció El Expreso, como se llamó a aquel equipo, con música de Horacio Pezzi y letra de Carlos Espínola.En la década del 20, Juan Razzano compuso Huracán y Carlos Marcuat fue el autor de Arriba, Ñuls. Conocida era la pasión de Alfredo De Angelis por Banfield, al que le dedicó El Taladro, uno de sus éxitos en el Glostora Tango Club.En cuanto a los tangos dedicados a los futbolistas, debe atribuírsele el primero al genial compositor Agustín Bardi, que compuso Tierrita, que entró en la historia de la música popular. Se lo dedicó a un arquero de Sportivo Barracas, cuyo nombre se perdió con el tiempo, que tenía la costumbre de frotarse con tierra las manos cuando los rivales iban a ejecutar un córner o un tiro libre. El hecho está documentado en La historia del barrio de Barracas.A Juan Botasso, excepcional arquero de Racing y la Selección, le dedicaron Cortina Metálica, de H. Zamora y Miguel Padula. Tras el subcampeonato olímpico en Amsterdam, en 1928, surgió ¡Monti solo!, en homenaje a Luis Monti, capitán del equipo, al que le pusieron letra Reguera y Lavié a un tema de Alejandro Scarpino, autor de Canaro en París. Otros cracks de las décadas del 20 y el 30 tuvieron su tangos. Ferreira de Carlos DAmici y Agustín Paredes, homenajeaba a Nolo Ferreira, notable delantero de Estudiantes de La Plata. José De Grandis y Fernando Germino le ofrecieron Tarasca solo a Domingo Tarascone, de Boca, capaz de hacer de media cancha un gol, como dice la letra que inmortalizó Gardel.Mariano García y Francisco Rofrano son los autores de Onzari, también de Huracán, autor del primer gol olímpico frente a los uruguayos. José Bagnatti compuso Varallo, crack de Boca. Trimani y Miguel Padula compusieron El rojo bravo, dedicado a Antonio Sastre. La Fiera, letra de Laino-Dispagua sobre música de Miguel Padula y Fernando Germino recuerda a Bernabé Ferreyra, un fenomenal goleador de River en la década del 30. Pastor Trivelli y Marcos Méndez son los autores de Orsi, campeón del mundo con Italia en 1934.Football porteño, de Emilio Sassenus fue de los primeros tangos vinculados con el fútbol. Fue editado en 1910 por la casa Luis Filardi. Después, con letra y música de Modesto Papavero (autor de ¡Leguisamo solo!) se conoció en 1927 Bravo nuestros campeones, ofrenda a la Selección argentina campeona en el Sudamericano de Lima. Olímpicos, de Alberto Gandolfo, con letra de Pacífico Zárate se estrenó en 1928, al consagrase subcampeón Argentina en Amsterdam. En 1955 los integrantes de la orquesta de Osmar Maderna, que dirigía Aquiles Roggero compusieron un tango colectivo Argentina campeón para los integrantes del equipo que ganó el título sudamericano en Santiago, Chile.Hacete footbalier, de José Yinelli y José Fernández ironiza sobre el fútbol profesional, que tuvo un gran auge en 1935. Colgá los botines, de Francisco Alessio y letra de Domingo Ferraro trata el tema del retiro de los futbolistas. En la década del 40, La mascota del barrio, de Aznar y Yiuso, grabado por Osvaldo Pugliese y Roberto Chanel y La número cinco, fue un tema de gran éxito de Alfredo Gobbi con la voz de Jorge Maciel.Y más cercano es Desde el tablón de Héctor Negro y Osvaldo Avena.Pero pocos tangos lograron la difusión popular de El Sueño del Pibe, de Reinaldo Yiso con música de Alfredo Puey. La grabación de Osvaldo Pugliese con Roberto Chanel vendió miles de discos. Un pibe de barrio recibe la citación para ser probado en un club e imagina un domingo:Faltando un minuto están cero a cero/ tomó la pelota sereno en su acción/gambeteando a todos enfrentó al arquero/ con fuerte tiro quebró el marcador.Un sueño que tal vez pasó por la mente de infantil de Diego Maradona, allá en Fiorito, y se concretó en el Mundial de México. Aquel tango quedó grabado en el recuerdo del genial jugador, que se atrevió a cantarlo por televisión en el programa de Antonio Gasalla.
El tango, como ha señalado el antropólogo Julián Ponisio, tiene un origen simultáneo y culturalmente interrelacionado con el fútbol "rioplatense": "la tríada potrero-pibe-gambeta... forjó las bases identitarias de un estilo corporal similar al movimiento corporal de la danza del tango, en la manera de entender la práctica del fútbol".
Importantes músicos tangueros compusieron tangos para los equipos de su simpatía, como Racing Club (1913) de Vicente Greco, "Independiente Club" y "San Lorenzo de Almagro" (1923) de Agustín Bardi o "El taladro" (1946) de Alfredo de Angelis, entre muchos otros. Los "cracks" también fueron tema para tangos, como "Tarasca solo" y "Ochoíta", grabados por Osvaldo Fresedo en 1928, dedicados a dos jugadores del amateurismo, Domingo Tarascone de Boca y Pedro Ochoa de Racing; del mismo año es "Monti sólo", de Alejandro Scarpino, dedicado al capitán de la selección argentina. En 1933, Francisco Canaro grabó "Bernabé, la fiera", sobre el goleador de River, Bernabé Ferreyra. En 1949 Armando Pontier grabó un bello tango titulado "A José Manuel Moreno". Otro tango notable es "Largue esa Mujica" (1929), de Juan Sarcione, grabada por Carlos Gardel, con una letra que..., utilizando todos los nombres de los jugadores de Huracán, construye todo un mensaje en doble sentido ("largue esa Mujica", por "largue esa mujer").
En 1961, Edmundo Rivero grabó el tango "Gol argentino" de Héctor Marcó, y en 1978, Astor Piazzolla compuso Piazzolla '78, una suite futbolística integrada por los temas "Mundial 78", "Marcación".., "Penal", "Gambeta", "Golazo", "Wing", "Corner" y "Campeón...".
Otros tangos importantes sobre el fútbol son "El sueño del pibe" de Reinaldo Yiso y Juan Puey («mamita querida,/ganaré dinero/seré un Baldonedo/un Martino, un Boyé»), "Déjelo señora" de Miguel Bonano y Degrossi («el pelo revuelto, las medias caídas,/los zapatos rotos, de tanto jugar,/una camiseta ya desida,/debajo una almita, que sueña ser crack»), "Pelota de cuero" de Edmundo Rivero y Héctor Marcó («mi pálida historia escrita en tus gajos/recorre a dos arcos el verde tapiz»), "La número 5" de Oreste Cufaro y Reinaldo Yiso, "Cero a cero" de Roberto Firpo y Clauso («de que sirve gastarse en gambetas/si tu viejo es como una pared»), "Patadura" de José López Ares y Enrique Carrera Sotelo, "Mi primer gol" de Miguel Bonano, Horacio Pettorossi y Alejandro Fattorini («ni el foul de tus intenciones/podrá evitar la caída/cuando en la red de tus labios/te acomode el primer gol»).
Πηγή / Fuente: εδώ.
Τρίτη 19 Ιουνίου 2012
ΕΝΑ ΤΑΝΓΚΟ ΓΙΑ ΤΟΝ ΝΤΟΜΙΝΓΚΟ ΤΑΡΑΣΚΟΝΙ
ΤΡΑΓΟΥΔΑΕΙ Ο ANTONIO BUGLIONE
ΠΑΙΖΕΙ ORQUESTA OSVALDO FRESEDO
Στίχοι: José De Grandis.
Μουσική:
Bernardo Germino.
Τάνγκο του 1928.
Το ακούμε και εδώ.
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“TARASCA”, EL
NOMBRE DEL GOL
A partir de
1922 comenzó a vestir la casaca xeneize una de las mayores pesadillas de los
arqueros rivales: Domingo Tarascon. Durante diez años su infalible olfato de
gol le regaló a la número 12 decenas de gritos eufóricos.
Cuando se hurga
un poco en la extensa historia de Boca, cuando se ojean páginas y páginas de
fotos descoloridas o de tonos sepia, cuando se recaban datos de los años del
amateurismo, indefectiblemente sale a la luz el nombre de Domingo Tarascone. Este
potente jugador se inició en Atlanta, en donde jugaba como wing derecho. Allí
se desempeñó hasta 1921, pero en la temporada siguiente mudó sus colores para
calzarse la azul y oro.
Tarascone arribó a la ribera y se encontró con que el puntero derecho boquense era, ni más ni menos, que el gran Pedro Calomino. Debido a ello, pasó a pararse en la cancha como centrodelantero. Esta decisión fue una de las más acertadas de su carrera: a partir de ese momento se convirtió en un voraz goleador que haría sufrir a defensas y arqueros por igual.
En 1923 y 1924 Boca se consagró campeón de la Asociación Argentina de Football y “Tarasca” -el sobrenombre que bajaba de los tablones- fue el máximo anotador de la escuadra xeneize en ambas oportunidades. Luego de este bicampeonato (el de 1924 en condición de invicto) Boca Juniors parecía ser el conjunto nacional más adecuado para realizar una gira por Europa. En febrero de 1925 el plantel embarcó rumbo al puerto de Vigo.
El periplo por el Viejo Continente resultó un éxito rotundo. Luego de viajar por varias ciudades de España, Alemania y Francia, el saldo fue de diecinueve encuentros disputados, quince ganados, uno empatado y sólo tres perdidos. “Tarasca” no dejó pasar la oportunidad y se dedicó a vencer vallas europeas: estrelló el balón contra las mallas seis veces. La vuelta a la Argentina recibió a los atletas de La Boca como héroes e inmejorables embajadores deportivos.
Al año siguiente, el equipo xeneize volvió a consagrarse campeón del torneo local y Domingo Tarsacone fue nuevamente el principal scorer del conjunto auriazul. Para aquel entonces, el centroforward boquense ya contaba con un socio de lujo en el ataque: Roberto Cherro. Entre 1927 y 1929 Tarascone y sus socios pelearon los torneos hasta el final y salieron ubicados en la segunda posición. El último campeonato del amateurismo, disputado en el año 30, fue monopolizado por Boca Juniors, que se alzó con una nueva estrella.
El paso al profesionalismo significó un giro de 180 grados. Si bien Tarascone todavía conservaba su capacidad goleadora intacta, los años gloriosos de la era amateur había finalizado y con ellos se iban los mejores recuerdos de “Tarasca”. En 1931 Boca obtuvo el primer torneo del profesionalismo; fue el último festejo del gran centrodelantero. Un año más tarde colgó los botines y, finalmente, dio respiro a los arqueros rivales.
Tarascone arribó a la ribera y se encontró con que el puntero derecho boquense era, ni más ni menos, que el gran Pedro Calomino. Debido a ello, pasó a pararse en la cancha como centrodelantero. Esta decisión fue una de las más acertadas de su carrera: a partir de ese momento se convirtió en un voraz goleador que haría sufrir a defensas y arqueros por igual.
En 1923 y 1924 Boca se consagró campeón de la Asociación Argentina de Football y “Tarasca” -el sobrenombre que bajaba de los tablones- fue el máximo anotador de la escuadra xeneize en ambas oportunidades. Luego de este bicampeonato (el de 1924 en condición de invicto) Boca Juniors parecía ser el conjunto nacional más adecuado para realizar una gira por Europa. En febrero de 1925 el plantel embarcó rumbo al puerto de Vigo.
El periplo por el Viejo Continente resultó un éxito rotundo. Luego de viajar por varias ciudades de España, Alemania y Francia, el saldo fue de diecinueve encuentros disputados, quince ganados, uno empatado y sólo tres perdidos. “Tarasca” no dejó pasar la oportunidad y se dedicó a vencer vallas europeas: estrelló el balón contra las mallas seis veces. La vuelta a la Argentina recibió a los atletas de La Boca como héroes e inmejorables embajadores deportivos.
Al año siguiente, el equipo xeneize volvió a consagrarse campeón del torneo local y Domingo Tarsacone fue nuevamente el principal scorer del conjunto auriazul. Para aquel entonces, el centroforward boquense ya contaba con un socio de lujo en el ataque: Roberto Cherro. Entre 1927 y 1929 Tarascone y sus socios pelearon los torneos hasta el final y salieron ubicados en la segunda posición. El último campeonato del amateurismo, disputado en el año 30, fue monopolizado por Boca Juniors, que se alzó con una nueva estrella.
El paso al profesionalismo significó un giro de 180 grados. Si bien Tarascone todavía conservaba su capacidad goleadora intacta, los años gloriosos de la era amateur había finalizado y con ellos se iban los mejores recuerdos de “Tarasca”. En 1931 Boca obtuvo el primer torneo del profesionalismo; fue el último festejo del gran centrodelantero. Un año más tarde colgó los botines y, finalmente, dio respiro a los arqueros rivales.
Πηγή: εδώ.
OSVALDO FRESEDO
ORQUESTA OSVALDO FRESEDO
JOSÉ DE GRANDIS
Δευτέρα 18 Ιουνίου 2012
ΣΥΓΧΡΟΝΟΙ ΘΡΥΛΟΙ ΚΑΙ Η ΕΞΑΠΛΩΣΗ ΤΗΣ ΕΙΔΩΛΟΛΑΤΡΙΑΣ
SEBASTIÁN
ETCHEBERRY
LEYENDAS CONTEMPORÁNEAS Y TRASMISIÓN DE LA IDOLATRÍA
Seré un
Baldonedo, un Martino, un Boyé,
dicen los muchachos, de Oeste Argentino,
que tengo más tiro que el gran Bernabé…
dicen los muchachos, de Oeste Argentino,
que tengo más tiro que el gran Bernabé…
(1943)
La hermosa estrofa de Reinaldo Yiso pertenece a uno de los tangos más conocidos en el mundo del fútbol. Evidentemente, El sueño del pibe, trascendió porque es del año 1943 pero aún hoy se escucha. Personalmente, no se como llegó a mi vida, pero me sé la letra completa y me emociona cada vez que la leo/oigo. A lo largo de los años, sin embargo, su letra ha mutado en numerosas oportunidades. Una vez, Maradona la cantó en vivo –y muy bien por cierto- en un programa de televisión y los nombres de Baldonedo, Martino y Boyé cambiaron por el propio Maradona, Kempes y Olguín. Años más tarde, Luciano Pereyra hizo su versión: “Seré un Maradona, seré el Batigol…”, y en vez de Bernabé Ferreyra honró los fusilazos del Chapa Suñé.
Curiosamente, el tango no hace más que retratar una realidad que ocurre con los ídolos. El otro día pensé si era posible que Messi superara a Maradona. Cuando surge esta comparación hay mucha gente, la mayoría, que la entiende como un absurdo. Que no, que Maradona hubo y habrá uno solo… y demás argumentos basados en fundamentos a veces, y productos del capricho en otras. ¿Tan grande fue Maradona que nunca hubo antes que él alguien mejor? ¿Tan grande fue que nunca nadie podrá superarlo? Obviamente que esto es un tema subjetivo, hay que aclarar, yo por mi parte me declaro maradoniano pero últimamente me puse a dudar. No sobre si Messi podría superarlo, dudo más con el pasado, con los Baldoneo, Martino, y Bernabé en cuestión.
La hermosa estrofa de Reinaldo Yiso pertenece a uno de los tangos más conocidos en el mundo del fútbol. Evidentemente, El sueño del pibe, trascendió porque es del año 1943 pero aún hoy se escucha. Personalmente, no se como llegó a mi vida, pero me sé la letra completa y me emociona cada vez que la leo/oigo. A lo largo de los años, sin embargo, su letra ha mutado en numerosas oportunidades. Una vez, Maradona la cantó en vivo –y muy bien por cierto- en un programa de televisión y los nombres de Baldonedo, Martino y Boyé cambiaron por el propio Maradona, Kempes y Olguín. Años más tarde, Luciano Pereyra hizo su versión: “Seré un Maradona, seré el Batigol…”, y en vez de Bernabé Ferreyra honró los fusilazos del Chapa Suñé.
Curiosamente, el tango no hace más que retratar una realidad que ocurre con los ídolos. El otro día pensé si era posible que Messi superara a Maradona. Cuando surge esta comparación hay mucha gente, la mayoría, que la entiende como un absurdo. Que no, que Maradona hubo y habrá uno solo… y demás argumentos basados en fundamentos a veces, y productos del capricho en otras. ¿Tan grande fue Maradona que nunca hubo antes que él alguien mejor? ¿Tan grande fue que nunca nadie podrá superarlo? Obviamente que esto es un tema subjetivo, hay que aclarar, yo por mi parte me declaro maradoniano pero últimamente me puse a dudar. No sobre si Messi podría superarlo, dudo más con el pasado, con los Baldoneo, Martino, y Bernabé en cuestión.
El hecho de considerar a alguien ídolo pasa por las emociones que despierta
éste en la persona. También están las distintas clases de ídolos, obviamente.
Quien tiene en un póster de la pared de su cuarto a Palermo será por su
perseverancia y su lucha optimista en la vida, no por sus cualidades técnicas,
y en eso si no estamos comparando. Aquí
nos referimos más a lo técnico, la habilidad, el diferente, la corona para el
debido rey. Y no voy a buscar uno, no voy a elegir ni siquiera para mi, al
mejor. Eso me lo reservo, en parte porque como dije es subjetivo y no intento
convencer a nadie y en parte porque no es esta la razón el artículo.
A lo que me
refiero es que los fuera de serie, más que ídolos eternos son del momento, de
cada época. Fíjense que quienes colocan a Alfredo Di Stéfano como el máximo
jugador de toda la historia son los más ancianos. Aquellos que cuando eran
niños escuchaban a sus padres y abuelos hablar de él. Casi lo mismo que lo que le
pasó a mi generación y las subsiguientes con Maradona. Nadie lo vio jugar, pero
es la leyenda más cercana que tenemos. Y los que sí lo vieron son los que nos
la traspasan. Y es lógico que nos quedemos fascinados con él porque escuchamos
más, leemos más y vemos más. Y así su mito se agiganta al punto de considerarlo
único e irrepetible. Nadie nos habla de Di Stéfano, apenas leemos algo, y es
que no tenemos un testimonio fiel, casi nadie lo presenció en vivo y eso
influye…
Lo mismo pasa con
otras figuras de ese momento. Antonio Sastre fue otro jugador extraordinario,
de toda la cancha, del que me queda la frase de los brasileños: “Un argentino
nos enseñó a jugar al fútbol”, extraño que un elogio así provenga de esas
tierras. Integrantes de la Maquina como Moreno, Labruna y Pedernera. El loco
Oreste Osmar Corbatta, el Garrincha argentino, Borghi, Houseman y tantos pero
tantos otros como los nombrados en el tango de Yiso. Bernabé Ferreyra y su
fierrazo inmortal (justamente, el otro día leí su historia y me hizo
replantearme tantas cosas con lo de Diego). Y todo esto apenas en materia
local…. Cada uno debe haber sido el Maradona de su época, eso está claro. Cada
mito debe haber pasado de boca en boca de padre a hijo. Como ocurrió con Diego.
Debe ser esa la razón, por eso dudo si Maradona fue tan magnánimo o mi
encandilamiento hacia él se debe a haber nacido justo en este momento. Su
categoría de extraterrestre no lo niega nada. ¿Pero su insuperable reinado?
Y a eso apuntaba, ahora nuestra generación se deleita con Messi, y lo que
nosotros le hablemos a nuestros hijos brotará de las emociones que nos hizo y
nos hará vivir él de ahora en más. Y tal vez en futuros años surga un nuevo
consagrado que se apropie de la gloria y el afecto popular. Y Maradona ocupará
el lugar de Di Stéfano tal vez, y al pobre Alfredo se lo recordará como un buen
jugador de los orígenes, pero desprestigiando su fama, menospreciando el
momento. Y está claro que su impacto, como el de todos, cada vez se desgasta
más. Quizás sea así, una cuestión de trasmisión de legado en el paso del
tiempo. Algún día también Messi lo sufrirá…
Ετικέτες
ΑΡΘΡΟ,
EL SUEÑO DEL PIBE,
ETCHEBERRY (SEBASTIÁN),
LEYENDAS CONTEMPORÁNEAS Y TRASMISIÓN DE LA IDOLATRÍA
Κυριακή 17 Ιουνίου 2012
FRANCISCO VARALLO
EL CAÑONCITO DE LA BOCA
(Varallo : Tango Foot-Balistico)
(Varallo : Tango Foot-Balistico)
Στίχοι και μουσική: Italo Goyeche.
Nombre: Francisco Antonio Varallo
Apodo: Pancho, Panchito, Cañoncito
Nacimiento: 5 de febrero de 1910 Los Hornos, La Plata, Buenos Aires, Argentina
Fallecimiento: 30 de agosto de 2010 (100 años) La Plata, Argentina
Posición: Delantero
Partidos internacionales: 11 (3 goles)
Goles totales: 236 (194 con Boca Juniors)
Año del debut: 1928
Club del debut: Gimnasia y Esgrima de La Plata
Año del retiro: 1940
Club del retiro: Boca Juniors
Apodo: Pancho, Panchito, Cañoncito
Nacimiento: 5 de febrero de 1910 Los Hornos, La Plata, Buenos Aires, Argentina
Fallecimiento: 30 de agosto de 2010 (100 años) La Plata, Argentina
Posición: Delantero
Partidos internacionales: 11 (3 goles)
Goles totales: 236 (194 con Boca Juniors)
Año del debut: 1928
Club del debut: Gimnasia y Esgrima de La Plata
Año del retiro: 1940
Club del retiro: Boca Juniors
Ετικέτες
ΤΡΑΓΟΥΔΙ,
BOCA JUNIORS,
CLUB ATLÉTICO BOCA JUNIORS,
EL CAÑONCITO DE LA BOCA,
GOYECHE (ITALO),
VARALLO (FRANCISCO ANTONIO PANCHO)
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